
Un día soleado, aún estando a puertas de noviembre. El corazón de Zaragoza. La catedral que aúna todas las culturas que vivieron en la capital.
La emoción en sus ojos y sus abrazos sinceros. Familia y amigos reunidos, compañía necesaria para dar un paso más en su historia de amor.
Este es el día de la boda de Darío y Verónica.